Despecho

El título no puede ser mejor. Desde mi decepción amorosa he estado raro, si bien antes estaba solo ahora estoy solo y desilusionado.
Es terrible, me pegó por todos lados. Quieran o no, aunque a unos días digamos que el idiota es él, que su novio es un cualquiera, y demás cosas. Ellos están juntos y tú soltero. Es aberrante. Además te sientes mierda y surgen preguntas que no tienen razón de ser; ¿Y si coge mejor que yo? ¿Y si la tiene más grande? ¿Y si lo hace reír más? ¿Y si le dice lo que nunca le dije? ¿Y si se lleva bien con su familia? ¿Y si duran mucho tiempo? ¿Y si me olvida?; ¡Ah pero cómo somos masoquistas!

Claro, mientras ellos están en el mame yo sigo con mi espiral depresiva. Escuchando canciones tristes para sentirme mejor, como diría Cerati, leyendo textos depresivos y que escurren miel (Unamuno, Del Valle Inclán, Bécquer, Machado...) La escuela hace lo suyo y me mantiene ocupado. Nostalgia total. Tal vez me estoy destruyendo para renacer como el fénix hahahah.

En fin, siguiendo las recomendaciones "de libro de texto" he buscado distraerme. Voy al gym ("Voy" haha). Salgo con mis amigos siempre que puedo, he salido con otros chavos e incluso he tenido sexo. Ahondaré en eso con fines taquilleros. La primera semana salí como loco a tener sexo. No me importó con quién ni como. En una semana cogí con 6 chavos. Salía a los bares, les sonreía y nos ibamos a cualquier lado, de los 6 sólo le pregunté el nombre a 2. Que en realidad vivían en la misma casa. Me quedé de ver con uno, para esto fumamos mota antes. Y yo con mota no puedo coger al óptimo. Me la paso diciendo pendejadas y riéndome. Tuvimos sexo, como lo tienen los casados 25 años después. Técnico y sin una gota de pasión. Mientras él se vestía yo fui a la sala y allí estaba su amigo. Empezamos a hablar y como me sentía mal por no haber cogido bien, en unos minutos ya estaba cogiéndome al amigo. Estuvo considerablemente mejor.

Yo estaba decidido a olvidar y a ser "el de antes" y como era mi última semana de vacaciones decidí aprovecharla, comencé a recontactar a unos conocidos y a conocer extraños en donde sea (llegué al límite de usar la cacería virtual!) Pocas veces preguntaba el nombre, me invitaba cualquiera y terminábamos en la cama, en el sillón o en cualquier otro lugar. Así pasó con 4.
Llegó el sábado. Gracias a lo que crean, salió un plan con amigos. Era mi oportunidad para sacar todo. Les conté la historia, tomé en buena cantidad, empezaron a hacer lo suyo "pues si lo quieres inténtalo" "(Su novio) Está bien chacalón"... después de muchísimo tequila, cerveza, vino y anís ya era "Es un pendejo" "Es un puto cualquiera" y todo eso. Mis amigos hicieron lo suyo.
Pero al otro día, mientras iba llegando a casa sentía una urgencia por pasar mi puerta. Entré y no había nadie en casa. Y lloré. No paré como por 2 horas. Me codeé con Magdalena.

Me sentía vacío y sin ganas de nada. Fatal.

El lunes comenzaron las clases, y con ello mi plan de recuperación. Decidí no tener sexo y darme un tiempo. La primera semana salió muy bien. La segunda no tanto. El domingo "el idiota" me habló y me dijo algo así como:
I: Hola
E: Hola
I: Como estás?
E: Bien. Tu?
I: Muy bien! :D
I: Ya no me vas a invitar a cenar? :P
E: Hahahah no
I: Podemos ir como amigos
E: Pues no somos amigos
 (Discusión que no viene al caso)
E: Mira, podemos llevarnos bien. Pero no vamos a ser amigos. Tal vez un día. Hablamos luego.
I: Pero todavía no me voy a dormir haha bye.

Ven como es un idiota? Pero lo quiero. "Lo digo como un lamento" hahahah
Naturalmente, pensé más de la cuenta en él. Además TODO tenía que ver con él, porque para variar tiene un nombre asquerosamente común. Supongan José o algo así. Y más asqueroso aún fue ese día desde la mañana "Tu tío está en Costa Rica, ayer llegó a San José", "Yo creo que el puente me voy a San José del Cabo (Hay dos cabos y los gringos le llaman "los cabos" pero son 2 ciudades...vecinas)" "José el novio de mi hermana..." "Vamos a leer a José de Espronceda" "Es en José Martí esquina con z"
Repugnante.
Ese día no pude más y en el camino a casa comencé a llorar. Una vergüenza. La escena era patética. Caminando rápido para llegar a mi casa, con mis manos en las cosas (brazos?) de la mochila, desvelado por hacer la tarea el día anterior y regresando de la escuela.
Me dije que iba a ser la última vez que lloraba por él, pero sabía que no todo había salido.
Ese viernes salí con un chavo (Manuel), es lindo, buena onda, es ingeniero, trabaja y estudia y viene de nada. Está saliendo adelante, es un gran tipo.
Pero no hay magia, salimos, hablamos, reímos pero no espero nada porque no hay nada. Seamos honestos, no es muy difícil eso de "remar" una relación. Una serie de frases prefabricadas, fórmulas básicas que conocemos desde pubertos y uno que otro beso al aire.

Llegó esta semana. El martes subía al camión (bus) que me lleva de la escuela a unas cuadras de mi casa. No había lugar así que tenía que ir parado. El chico que estaba sentado en frente de mí se me quedaba viendo así que lo supe en seguida, estaba con ganas. Se me quedaba viendo de una manera tan lasciva que en unos minutos se me paró, hizo cómo que se rascaba el brazo y me tocaba por encima del pantalón. Luego yo me acerqué mas, y así estuvimos. Ni una sola palabra ni nada. Luego se bajó y me quedé en su lugar. Me sentí bien. No por eso, por el hecho de que todavía tengo "levante". Ese mismo martes estaba eliminando imágenes de mi teléfono porque tienen la manía de enviar todo por whats y se llena de basura el teléfono. Digo, no es como que se acabe el espacio pero tener 700 fotos de las cuales 200 no sirven me irrita.
Procedí a eliminarlas, vi unas con mis amigos, de salidas, cosas lindas y llegó aquella única foto con él. Los dos sonriendo uno al lado de otro. Pero ya no lloré, no salió ni una lágima, pero allí estaban. Como un pre al llanto. Eliminé la foto.
Este viernes, quedé en salir con Manuel, nos íbamos a ver a las 6 pero no pudo a esa hora y lo aplazamos hasta las 9. Yo ya estaba listo desde las 4:30 maso y como no tenía nada que hacer (cof* tarea* cof*) me dispuse a ir a pagar unas cosas que se tienen que pagar (luz, agua..) y me habla un chico, "que vas a hacer?--Nada, por?--por si íbamos por unas cervezas--pues puedo hasta las 8--perfecto! en donde andas?--por zxc--ah estás cerca, paso por ti--"
Y ya. Nos vimos, por primera vez haha fuimos por unas cervezas y terminamos haciéndolo en su coche en un estacionamiento. Fue cerdo. Teníamos ganas y estabamos dispuestos, todo se puso en su lugar. Después llegué con Manuel. Le hice de pre-noviecito y todo salió muy bonito, me di cuenta que era mi "pareja rebote" (La pareja sustitución, que si bien no es una relación natural pretende sustituir a la anterior) y que tal vez podría salir lastimado porque podemos hacer todo. Pero dudo mucho que llegue a sentir algo más por él. Pero es él o yo y necesito hacer esto por mi salud emocional. Total fuimos a un antro y así. Se puso bien el ambiente.
Me enocntré a un conocido de primaria que yo juraba que era gay pero nadie me hacía caso y allí estaba atascándose con su novio (o alguien). Claro que los dos fingimos que ni nos vimos.
Ya nos despedimos y todo.
Iba camino a casa cuando me llega un whats:
A: Hola! Como estás?
E: Bien y tu?
A: Aquí en la peda. tu?
E: Yo ya voy a mi casa
A: Ven a seguirla con nosotros!
E: Hahah bueno
Fui.
Estaban solo mi amigo y su novio. Rápidamente supe de que se trataba. Estábamos hablando, mientras tomábamos claro. Y de pronto sacaron la mota (marihuana), mi amigo sabe que no cojo bien con eso así que supuse que era verdaderamente de amigos la cosa y me dispuse a fumar que parecíamos tren.
Luego me dijeron vente a este sillón y de allí comenzó el pedo.
Me empezaron a tocar, pero al mismo tiempo. Tenían una sincronización perfecta. Era todo simétrico. Yo me sentía en un caleidoscopio. Claro que eso, el alcohol y la mota me pusieron en un estado "elevado" hahahah no sé en que momento terminamos en la cama. Pero sé que no cogimos.
Hasta la mañana. Allí si, hicimos de todo. Ya me despedí de ellos, me dijeron que a ver que día nos vemos y ya. Llegué a casa.

Todavía duele, pero allí la llevo. No fue amor, eso es seguro. Pero cuanto lo quise. Hoy hace un mes, en una noche como esta, estabamos bajo la misma sábana. Pero bien decía Neruda:

"[...]  

Porque en noches como ésta la tuve entre mis brazos,
mi alma no se contenta con haberla perdido.

Aunque éste sea el último dolor que ella me causa,
y éstos sean los últimos versos que yo le escribo."